Existe una relación entre el dinero y el bienestar, son términos que expresan calidad de vida y felicidad, lo cual está vinculado a experiencias positivas.
Equivocadamente pensamos que con más “riqueza”, adquirimos más bienes y servicios que mejoran innumerables aspectos de nuestras vidas, todo enfocado para lograr la felicidad. Sin embargo, un artículo del Wall Street Journal señala que no se trata de comprar mucho, sino de saber cómo usar el dinero y cómo gastarlo inteligentemente.
Diversas publicaciones e investigaciones sobre el tema coinciden en que existen algunos conceptos básicos para comprender por qué el dinero puede aumentar la sensación de felicidad, algunos de ellos los mencionamos a continuación:
• Prioridades de gasto
Todas las publicaciones coinciden en la importancia de considerar las prioridades a la hora de gastar, la cantidad de dinero no sólo compran posesiones o servicios, sino “experiencias” que son las que aumentan los niveles de felicidad.
Un trabajo de investigación del profesor de psicología de la Universidad de Harvard, Dan Gilbert, destacó que los recuerdos de personas, lugares y actividades son los que califican las personas como factores de felicidad cuando han invertido dinero en éstos.
Otro factor importante es la anticipación y planificación de esa experiencia. El sentimiento de felicidad aumenta cuando se piensa en lo que se va a vivir y se advierte, previamente que va a ser algo positivo.
• El ahorro y su proyección
Un estudio de la Universidad de Wellington de Nueva Zelanda, concluye que existe una relación entre el ahorro y la libertad. La posibilidad de hacer realidad tus sueños y proyectos es lo que produce felicidad. Pero también involucra el hecho de poder tomar decisiones cuando las quieras hacer y tener un respaldo financiero que te lo permita.
La revista Forbes menciona que la escasez también juega un papel muy importante en este tema, reconocer que es poco el dinero que se tiene para disfrutar las cosas, genera una sensación de incertidumbre que va en contra de la felicidad.
• Pensar en otros
El dinero más que una inversión en felicidad, se puede considerar como una forma de generar bienestar a otros. No hablamos solamente de inversiones sociales o caritativas, sino considerar a personas que tengan una necesidad y que les podamos apoyar para impactar positivamente sus vidas. Naturalmente primero debemos pensar en nuestra familia, amigos y comunidad donde vivimos.
Finalmente se debe reflexionar en lo que el dinero puede comprar y qué no. El dinero puede comprar una casa, pero no un hogar, un trasplante de corazón, pero no el amor; estudios, pero no educación. Disfrutemos de lo simple de la vida y aprendamos a utilizar al dinero como una herramienta útil en nuestras vidas.